El Día de Muertos nos recuerda que la despedida nunca es final, sino un hasta pronto. Cada año, los altares se llenan de flores, velas y recuerdos que iluminan el regreso de quienes amamos.
El 27 de octubre es especial para recordar a esos peluditos que dejaron huella en nuestro corazón. Sus colitas que se movían de alegría al vernos y esas miradas que decían más que mil palabras siguen presentes en cada rincón de nuestra memoria,
¿Por qué el 27 de octubre?
Según la tradición popular, los seres queridos que partieron comienzan a llegar a finales de octubre. Los primeros en aparecer son nuestros peluditos. Se dice que ellos son guías del más allá y abren el camino para que los demás puedan cruzar, protegiéndonos y acompañándonos desde el otro lado.
Por eso, cada 27 de octubre se convierte en un día muy especial. Recibirlos con alegría es igual que cuando movían su colita al vernos llegar.
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Una ofrenda con huellas
Cada familia recuerda a sus mascotas de una manera única y especial. Algunos colocan en el altar su collar, el platito que usaban, un juguete lleno de historias, agua fresca o incluso su bulto de The Top Choice®. Otros eligen una foto, una silueta dibujada o una vela con forma de huellita.
No importa el detalle, lo que realmente cuenta es el amor detrás de cada ofrenda. Porque lo más Top de esta tradición es recordar que nunca se van del todo. Cada 27 de octubre, ellos regresan y nosotros los recibimos con la misma alegría con la que alguna vez movieron su colita al vernos llegar.